domingo, novembro 7

Del miedo a las turbulencias y la eternidad de los meses y los desenllaços

Y como siempre, Sito. Me habló de las edades de los árboles, y los momentos en los que puedes haber cortado las ramas, en los que sentiste que te cortaron las ramas y en los que sentiste que tú pudiste haberlo hecho. Intento la justificación rememorando un árbol aún débil, con profundos cortes del Québec, o de la misma península, que debido a mi falta de amor propio, me dolieron en su momento y ahora recuerdo con algo de congoja. Pero más repugnante resulta cuando cierta inocencia (en el juego, en que uno ve normal algo que el otro no) acaba en llanto oculto en la tarde, llanto inevitable en la noche y llanto insomne en la madrugada, cuando no puedes ni quieres dormir y tienes más ganas de probar tu capacidad de volar (desde la azotea de un apartado y noveno piso) que de centrarte en la ruina de carrera estudiantil que estás llevando.


¿Alguien más ha sentido el vómito tan cerca del paladar?. A lo mejor lo estoy llevando más allá de lo razonable y es por ello por lo que intento sacar respuestas del teclado, de lo que me digan mis (pocos pero fieles) lectores y del treinta de julio de dos mil diez, del tres de septiembre o del más reciente siete de noviembre, fechas que para mí, marcaron, citando a Joan Miquel Oliver (Ai Las!), un principi, un nus i un desenllaç. Y el desenllaç promete ser algo que de tan bonito, no sé ni como llamarlo. Optaré por 'mien'.

Cada vez que digo (pienso) nuestro, sonrío, me quedo en blanco y escribir una sola palabra se convierte en toda una hazaña. Cada vez que dices nuestro, se me va la lucidez y pierdo el norte (del norte). Nos queda ir a Barcelona para no salir de la cama más que para aventurarse en busca de ese restaurante, exigiendo generosidad con la ceba caramelitzada y acabar devorándolo en Plaça Catalunya como dos turistas más.

1.Sueño con oírte decir 'Em podria donar un entrepà de pollastre, amb enciam, cogombre sense tomàquet i amb ceba caramelitzada, si us plau?' y ahí lo rematarías con un 'merci' xarnego y celestial.
2.Em sap greu haber tenido que mirar en un traductor el plural de 'desenllaç', estaba claro que era 'desenllaços', coño.


terça-feira, novembro 2

De lo que salió del hombre más guapo de Tolosa y una mujer lucense

Entre sargantanes, pujas y gorros de lana, no me apetece mucho perder el tiempo escribiendo penas. Porque no tengo.


Os dejo con Julio de la Rosa, que no decepciona.